lunes, 27 de abril de 2009

Circulos

Tengo miedo de no poder levantarme, tengo miedo que mis lágrimas terminen por ahogarme, tengo miedo y me duele, temor y dolor se combinan en mi pecho y me destrozan, me consumen, me atrapan y me hunden. Hoy me veo arrastrado hacia las indomables fauces de la soledad y alcanzado por lo oscuro de la incertidumbre.
Tengo miedo que termine pasando lo que quiero que pase y tengo miedo a la vez de que pase algo distinto, tengo miedo de ser demasiado cobarde y también de ser valiente, tengo miedo que mi accionar responda a mi razón así como le temo a que este se vea influenciado por mi corazón.
Temor y dolor, fastidio, enojo, temor y dolor. Querer y no poder, buscar y no encontrar, saber pero ignorar, querer y no querer, encontrar y perder, perder pero ganar, ganar pero sufrir, sufrir y superar, superar pero retroceder, retroceder para avanzar, avanzar para chocar, chocar para terminar, terminar para volver a empezar.

lunes, 20 de abril de 2009

Del cielo al Maracaibo

Justo ayer una duda invadió mi cabeza, me atacó por sorpresa y me hizo sacar las conjeturas mas extrañas que hubiera podido imaginar. Justo ayer llego a mi mente la siguiente duda… ¿Dios es un mirón depravado?, tal vez a alguien le parecerá hereje mi pensamiento, pero si él es omnipresente significa que también esta mientras dos personas exteriorizan físicamente su amor. Y no me vengan a decir que se tapa los ojos o mira para otro lado, esa no me la creo, esta ahí y bien atento a los movimientos, así debe haber sido como aprovechándose de un descuido de José se hizo cargo de María y ella claro, ante semejante goce divino ya no quiso manchar su recuerdo con la vulgaridad de lo terrenal.
Con esto no quiero decir que Dios no merezca el respeto y la adoración que hoy en día recibe, solo que hay que tratar de poner las cartas sobre la mesa y decir las cosas como son, en definitiva bastante metido resulto ser, pero quien puede juzgarlo, es Dios, él tiene la obligación de estar en todos lados, es el destino que le toco, no esta mal que de vez en cuando le toque entretenerse con el goce ajeno, entre tanta basura que tendrá que ver el pobre, igual calculo que ya se habrá aburrido de mirar, lo que sí no estaría mal seria pedirle una planilla de Excel con las estadísticas del estilo “Posiciones por país, edad o época histórica”. Que se yo, como para que tenga algo distinto que hacer, si no tiene ganas de escribir que se lo dicte a alguien, algún secretario debe tener, ¿o ahora me van a decir que atiende todas sus obligaciones sin ningún ayudante?
Como para terminar este pequeño análisis propongo que empecemos a rezar con un simple cambio en una palabra, a partir de ahora no seria descabellado decir: “Padre nuestro que estas en el telo”…

miércoles, 15 de abril de 2009

Los buenos mueren VII

Estamos en Higuera, un pequeño pueblito de Bolivia, el 9 de octubre de 1967 allí, en una tienda de combate se encuentra tendido y con las piernas destrozadas un prisionero que ayer fue capturado en la Quebrada de Yuro, hace muchos años que la CIA persigue a este hombre, a este guerrillero, a este símbolo. Una y otra vez los había burlado y vencido, una y otra vez había triunfado sin otra arma que su ideología. Pero ayer no había podido, un complot, una traición y una ráfaga de metralla le habían destrozado las piernas y lo habían dejado indefenso.
El Che Guevara yacía en la tienda esperando su hora, por fin llegó Mario Terán, soldado encargado de terminar con su vida, “usted ha venido a matarme” dijo el Che al verlo entrar, al ver en el rostro del soldado duda y temor por lo que estaba a punto de hacer lo miro fijo, inflo el pecho y le dijo “¡Póngase sereno y apunte bien! ¡Va a matar a un hombre!” sus últimas palabras quedarían por siempre resonando en la cabeza de Terán.
Con su muerte el mundo perdió grandeza, encanto y convicción, aquella ametralladora que le asesto el golpe final acabó con la vida de un hombre que había echo historia, alguien que amaba a la gente y por eso odiaba a las cosas, un tipo sencillo y humilde que nunca había dudado en dar una mano al prójimo, en alzarse contra la injusticia y trabajar mas que nadie, durante su estadía en la Cuba comunista siempre había sido el primero en llegar a las cañas azucareras y el último en irse. Por su humildad, grandeza y carisma había sabido ganarse el amor de hombres, mujeres, niños y perros, el no hacia diferencias y siempre actuó de acuerdo a sus ideales y convicciones. Hoy se nos fue, dejo en el corazón de muchos un vacio inmenso y un dolor terrible, hoy se marcho unos de los últimos valientes capaces de morir luchando en contra de lo que creen que es injusto, solo su recuerdo quedara en nosotros, y sus frases, porque su voz nunca pudo ser silenciada: “Si no existe la organización, las ideas, después del primer momento de impulso, van perdiendo eficacia.”; “Ha pasado un camión del ejército, el mismo de ayer, en la parte de atrás dos soldaditos envueltos en una manta. No he tenido el valor de dispararles ni he tenido suficientes reflejos para capturarlos.”; “Déjeme decirle, a riesgo de parecer ridículo, que el revolucionario verdadero está guiado por grandes sentimientos de amor.” Estas son solo algunas de sus muchas palabras en las que se dirigió a los pueblos, en ellas se reflejan sus valores.
Antes de marcharse de Cuba les escribió una carta de despedida a sus hijos, el Che presentía que aquel seria su último viaje, al final de la carta decía: “…y sobre todo, sean siempre capaces de sentir en lo más hondo cualquier injusticia cometida contra cualquiera en cualquier parte del mundo. Es la cualidad más linda de un revolucionario.”
Por esas paradojas del destino, de la vida y de la muerte, la imagen de este revolucionario anticapitalista se convertirá en una de las figuras mas comerciales del mundo, porque así es este sistema, no tiene principios y hace de la muerte de su más acérrimo enemigo un negocio redondo, así funciona hoy el mundo, de la injusticia se alimenta y ya no quedan buenos por morir, nos queda resignarnos o luchar y la mayoría opta por la primera...

domingo, 12 de abril de 2009

Como hacer

Como hacer para entendernos si en nuestras similitudes nacen nuestras diferencias, como ponernos de acuerdo si siempre que uno va el otro esta volviendo, si los dos queremos lo mismo, pero en distintos momentos y de diferentes maneras. Como se hace cuando en el cariño nace el dolor, cuando del amor surge el odio y de los recuerdos más dulces emanan los rencores más amargos.
Como hacer para entendernos si nuestras más firmes convicciones son nuestras más profundas contradicciones, como ponernos de acuerdo si la mutua incomprensión alberga nuestra relación.
Como conseguir que el deseo no le gane a la razón y que el corazón salga ileso. Como hacer que un ciego se comunique con un sordo. Como se hace a tocar sin manos, a querer sin querer, a besar sin sentir, a amar sin odiar. Como se oculta el sol con un dedo, como hacer que los recuerdos de ayer no se conviertan en el castigo de hoy y en la cárcel del mañana…

lunes, 6 de abril de 2009

Perdiendo el tiempo II

La noche vuelve a ser su hábitat, nuestro amigo se pasea de un lado a otro, se mueve en el boliche, camina, canta, baila, sonríe y saluda, busca alguien que quiera acompañarlo cuando llegue el turno de marcharse del lugar, de vez en cuando se encuentra algún amigo y van a buscar un trago a la barra, cargan combustible y continúan el acecho nocturno.
En medio de su recorrido tropezó de golpe con una chica, linda ella, de repente sus ojos se encontraron y el supo en ese instante que no iba a fallar, detuvo su marcha, la miro fijo y musito:
- Perdón – lo dijo simulando una timidez inexistente en él.
- Sí, te perdono, pero no se muy bien por que – respondió ella.
- Ja! Sabia que me ibas a perdonar, porque errar es humano y perdonar es divino, con esto queda objetivamente demostrado que sos una diosa.
- Ah bueno, ¿Qué pasó? ¿Estuviste leyendo las tarjetitas que dan los chicos que piden por los bares?
- En realidad no se leer, es un quilombo, todos esos dibujitos que juntos forman palabras, deja, prefiero hacer cosas mas útiles con mi tiempo, bailar la conga en el Monte Everest, saltar en una pata en el kilometro 11 de la autopista, que se yo, cualquier cosa que me sirva mas en un futuro.
- Claaaro, esas sí son cosas interesantes, veo que sos más boludo de lo que me habías parecido al principio.
- Puede ser, a mi me pasó lo mismo con tu fealdad, de lejos me habías parecido pasable, seré ingenuo.
- Sorry señor belleza, prefiero ser fea y no hueca.
- Si, especialmente porque una condición la tuviste de nacimiento, la vida no te dejo elegir, asique tu preferencia esta condicionada por tu naturaleza.
- Tomatela pendejo, ¿Quién te crees que sos?
- Uh, es verdad, no me presente, vaya modales los mios, Adolfo, un gusto – dijo al tiempo que le tendía la mano y le besaba la mejilla - una pregunta, ¿nos vamos a seguir peleando o ya nos podemos empezar a besar?
- ¿Y a vos que te parece? – atino a responder ella, la pregunta la había desconcertado, había caído en la red.
Sin dudarlo un segundo Adolfo la tomó por la cintura y la beso, de ahí a su auto no paso mucho tiempo, había conseguido su objetivo, luego regresaría a su casa contento, sin darse cuenta de lo estéril de aquellos encuentros casuales, de lo efímero del amor pasajero, perdía el tiempo sumando experiencia en cuerpos ajenos, fríos y distantes, los disfrutaba, pero nunca nada quedaba de ellos.
Perdía el tiempo, pero al menos, mientras tanto la pasaba bien.